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Push Dose en Emergencias

En esta nueva entrada voy a haceros un pequeño resumen sobre los Push Dose en Emergencias.

¿Qué es un push dose?

Es la administración en bolo de un vasopresor que habitualmente ponemos en bomba de infusión continua, con el objetivo de optimizar el estado hemodinámica del paciente.

¿Cuándo ponerlo?

La hipotensión aguda en la Unidad de cuidados intensivos (UCI) y urgencias está asociada con un aumento de la morbilidad y la mortalidad. Históricamente, esta hipotensión aguda se manejó con infusiones vasopresoras continuas. Sin embargo, los push dose administrados periféricamente se están utilizando con más frecuencia para el manejo de la hipotensión aguda en una variedad de escenarios clínicos como en hipotensiones secundarias a sedación, procedimientos intervencionistas, escenarios donde la hipotensión favorezca la mortalidad como la sépsis, paciente traumático, ACVA, recuperación de la circulación espontánea, etcétera.

¿Qué fármacos se suelen utilizar?

Los principales fármacos son la Adrenalina, Efedrina, Fenilefrina, Noradrenalina y Vasopresina.

La Fenilefrina y la adrenalina son los dos vasopresores más comunes administrados como push dose. La Efedrina tiene un uso más en entorno quirúrgico.

La fenilefrina ejerce sus efectos a través de la actividad α-adrenérgica que resulta en vasoconstricción; la adrenalina tiene actividad tanto α como β-adrenérgica, lo que resulta en vasoconstricción y aumento de la contractilidad cardíaca.

Cada fármaco tiene un inicio de acción de aproximadamente un minuto, por lo que es ideal para episodios de hipotensión en emergencias.

¿Efectos adversos?

Los posibles efectos adversos que podemos encontrar con los push dose son la bradicardia refleja en fenilefrina, y taquicardia e hipertensión asociada a la adrenalina.

¿Cómo preparalo?

Para ver cómo preparar el push dose de adrenalina, os dejo un video que realicé junto a Rocío Rodríguez (@enfermera.desdeelalma)

¿Qué dice la evidencia?

Prehospital Emergency Care 2020: 

Los push doce de adrenalina pueden ser un método eficaz para resolver temporalmente la hipotensión en pacientes críticos. En los casos en los que se administró PDE, se encontró que los eventos adversos eran raros directamente después de la administración de PDE. 

The safety and efficacy of push dose vasopressors in critically ill adults The American Journal of Emergency Medicine November 2022:  los PDP son eficaces en el aumento de la presión arterial durante el período de hipotensión aguda en la sala de emergencias y la UCI. 

Advertencia

Salvo la Efedrina en contexto perianestésico y la Fenilefrian, los push dose no están en las Fichas Técnicas de los fármacos.

Referencias

(1) Weingart S. Push-dose pressors for immediate blood pressure control. Clinical and Experimental Emergency Medicine 2015 Jun 1,;2(2):131-132.

(2) Singer S, Pope H, Fuller BM, Gibson G. The safety and efficacy of push dose vasopressors in critically ill adults. The American journal of emergency medicine 2022 Nov 1,;61:137-142.

(3) Nawrocki PS, Poremba M, Lawner BJ. Push Dose Epinephrine Use in the Management of Hypotension During Critical Care Transport. Prehospital emergency care 2020 Mar 3,;24(2):188-195.

(4) Scott Weingart, MD FCCM. EMCrit 6 – Push-Dose Pressors. EMCrit Blog. Published on July 10, 2009. Accessed on June 11th 2023. Available at [https://emcrit.org/emcrit/bolus-dose-pressors/ ].

Actualización de las Guías PHTLS Ed. 10

El pasado octubre de 2022, la Asociación Nacional de Técnicos en Emergencias de EEUU (NAEMT) presento la actualización en las Guías PHTLS en su décima edición.

Esta actualización viene a remarcar lo que la evidencia y los estudios nos viene marcando desde hace unos años. No nos pilla de nuevas. En esta entrada, os desgloso los principales puntos de las actualizaciones de las Guías PHTLS.

Manejo del paciente

  • Enfoque en el abordaje inicial de evaluación y tratamiento de acuerdo con el acrónimo XABCDE, dándole relevancia al manejo inicial de la hemorragia masiva, que es un espejo de los principios MARCH
  • Desafíos del tiempo de escena prolongado
  • Se cambia Cinemática del trauma por física del trauma.
  • Nuevas pautas de triaje de campo de ACS. El Triage del ACS, National Guideline for the Field Triage of Injured Patients (Guía nacional para el triage de campo de pacientes lesionados) del Colegio Americano de Cirujanos (ACS).

X. Hemorragia exanguinante

  • El PHTLS 10° Ed. NO RECOMIENDA LA IMPROVISACIÓN DE TORNIQUETE (TQ)
  • Se confirma que deben existir TORNIQUETES (TQ) específicos para pacientes pediátricos.

A. Vía aérea

  • Se insiste en los protocolos de Restricción del Movimiento Espinal.
  • Descartar en el medio prehospitalario la cricotiroidotomía con aguja, obligando a que todo paramédico se capacite en la CRICOTITOIDOTOMÍA QUIRURGICA, procedimiento sencillo de efectuar.
  • Guía actualizada sobre el uso de Dispositivos supraglóticos.
  • Respiración optimizada y contenido de oxigenación

B. Ventilación

Trauma torácico

  • En esta nueva edición, aclaran el uso de los sellos torácicos.
  • Uso de E-FAST en el campo. Recordemos que el FAST extendido es valorar la región pulmonar a parte de la abdominal.

C. Circulación

  • Se confirma que existe evidencia científica beneficiosa para el uso del inmovilizador en fractura pélvica.
  • Introducción oficial del E-FAST (Extended Focused Assesment with Sonography in Trauma) diseñado para detectar líquido peritoneal, líquido pericárdico, neumotórax y/o hemotórax en un paciente con trauma.
  • Importancia del manejo del dolor (Ketamina)
  • Menos cristaloides y priorizar transfusiones de sangre.

D. Neurológico

Cabeza y cuello

  • Discusión mejorada de traumatismo de bajo impacto leve.
  • Discusión ampliada de las categorías de hemorragia intracraneal.
  • Discusión exhaustiva de los desafíos de la coagulopatía en pacientes con traumatismo de bajo impacto.
  • Revisión actualizada de los datos que informan las decisiones sobre el manejo de las vías respiratorias.

Lesion espinal

  • Los términos restricción del movimiento de la columna, estabilización de la columna e inmovilización de la columna continúan usándose indistintamente en PHTLS 10e. Sin embargo, el término restricción de movimiento espinal (SMR) representa el idioma predeterminado.
  • Retiramos las referencias al uso de tablas cortas y dispositivos de extracción cortos, ya que ya no se usan comúnmente y no están basados ​​en evidencia.
  • El uso de SMR debe considerar los desafíos individuales en el transporte de pacientes, incluida la comodidad y el riesgo de compromiso de las vías respiratorias o úlceras por presión.

Si quieres más información, no dudes escuchar el capítulo del podcast:

Todavía no tenemos el manual en castellano. Puedes consultar en la página del distribuidor la versión en inglés: https://www.psglearning.com/ems/paramedic/productdetails/9781284272291

Espero que os haya gustado esta nueva entrada.

Hasta pronto.

Derribando mitos: La posición de Trendelenburg

Introducción

Lo primero de todo, ¿Qué es la posición Trendelenburg? Se define como la inclinación del cuerpo, donde la cabeza está más baja. La posición de Trendelenburg modificada o posición antishock, es cuando la cabeza está al nivel del cuerpo y las piernas se levantan pasivamente.

Fuente: Wikipedia

Ahora que ya sabemos qué es el trendelenburg o lo hemos recordado, vamos con un poco de historia. 

Historia del Trendelenburg

La posición trendelenburg se atribuye al cirujano alemán Friedrich Trendelenburg que vivió de 1844 a 1924. Esta posición se utilizó originariamente para mejorar la exposición quirúrgica de los órganos pélvicos. Hoy en día se sigue utilizando en quirófano.

Fuente: Wikipedia

En la primera guerra mundial, el fisiólogo estadounidense Walter Cannon, popularizo el uso de la posición trendelemburg como tratamiento para el shock, esta posición podría aumentar el retorno venoso al corazón, aumentar el gasto cardíaco y mejorar la perfusión de los órganos vitales. Una década más tarde, Cannon cambio de opinión sobre los beneficios del Trendelenburg, pero ya era demasiado tarde, su uso ya estaba generalizado.

Mito extendido

En principio, la posición de trendelenburg pretende aumentar el retorno venoso al corazón y, por lo tanto, el gasto cardíaco al cambiar el volumen intravascular de las extremidades inferiores. Se utiliza como intervención inmediata para mejorar la hipotensión y el shock hipovolémico, pero todos los estudios publicados sobre la posición de trendelenburg y la supuesta mejora de la hipotensión, tienen niveles de evidencia bajos y son estudios de calidad moderada.

Se ha demostrado que el volumen de sangre que drena de las extremidades inferiores en el paciente hipovolémico es mínimo y no produce un aumento significativo de la presión arterial, e incluso, el uso del trendelenburg puede ser perjudicial para ciertos pacientes como pacientes obesos o con patología pulmonar, ya que puede contribuir al deterioro de la función cardíaca y pulmonar, al hacer que el peso de los órganos abdominales recaiga sobre el diafragma. También puede incrementar la presión intracraneal e intraocular y además puede producir ansiedad al paciente.

¿Qué dice la evidencia?

Margo Halm en su revisión en 2012 “trendelenburg position: put to bed or angled toward use in your unit?” publicado en el American Journal of Critical Care, encontró varios estudios que demostraron que la posición trendelenburg produce una disminución del flujo sanguíneo cerebral, de la saturación de oxígeno, del flujo de las extremidades superiores y la capacidad funcional de reserva de los pulmones.

Si nos fijamos en las guías del PHTLS sobre la posición de trendelenburg en el paciente traumático con shock, nos dicen: La posición de Trendelenburg o la posición de shock, aunque se ha utilizado durante 150 años, no ha probado ser efectiva. La posición trendelenburg puede agravar la función ventilatoria ya deteriorada, presentar riesgo de aspiración u obstrucción de la vía aérea y aumentar la presión intracraneal en pacientes con TCE.

La Asociación Americana del Corazón, en sus guías de primos auxilios del 2010, indican que no hay evidencia directa de su beneficio en el estado de shock.

La verdad, es que sorprende como han pasado tantos años y en numerosos protocolos, guías clínicas, siguen incluyendo la elevación de las piernas ante pacientes con hipotensión secundaria a hipovolemia.

¿Es buena la posición de Trendelenburg?

Os preguntaréis, ¿entonces, no es buena la posición trendelenburg? 

Esta posición hay que utilizarla para lo que fue concebida; mejorar la exposición quirúrgica de los órganos pélvicos, e incluso para evitar la embolia gaseosa en la colocación de los catéteres centrales o la administración de ciertos fármacos a nivel espinal, pero la evidencia ha demostrado que la posición trendelenburg no sólo NO ayuda a los pacientes con shock hemorrágico o hipotensión, si no que en realidad, puede ser perjudicial debido a los efectos ventilatorios y circulatorios.

Para finalizar, creo que es necesario seguir investigando con tamaños muéstrales más grandes que respalden el uso de esta posición, pero por el momento, debería evitarse como tratamiento de la hipotensión o shock agudo.

Referencias:

  • Shammas, A. & Clark, A. (2007). Trendelenburg Positioning to Treat Acute Hypotension: Helpful or Harmful? Clinical Nurse Specialist. 21(4), 181-188. PMID: 17622805
  • Bridges, N.& Jarquin-Valdivia, A. (2005). Use of the Trendelenburg Position as the Resuscitation Position: To T or Not to T. American Journal of Critical Care. 14(5). 364-368. PMID: 16120887.
  • McGill University Health Centre: Division of Nursing Research and MUHC Libraries. 
  • Johnson S, Henderson SO: “Myth: The Trendelenburg position improves circulation in cases of shock.” Canadian Journal Emergency Medicine. 6(1):48-49, 2004.
  • Ballesteros S, Rodrígues A. Efectos de la posición de Trendelenburg sobre el estado hemodinámico: una revisión sistemática. Emergencias. 2012; 24: 143-150.
  • Manual del proveedor PHTLS. NAEMT 2018.
  • https://www.instagram.com/p/CHVx5gNJ-FP/?utm_source=ig_web_copy_link

Equipos de protección individual para sanitarios

Safeguru, ecommerce referente en equipamiento de protección individual (EPI) y seguridad industrial, nos explica en este artículo la importancia de contar con equipamiento de protección de calidad y cuáles son los EPIs primordiales en el sector sanitario.

El primer punto imprescindible en el sector de la salud es saber frente a qué riesgos nos enfrentamos: existen desde riesgos biológicos y químicos, hasta físicos y ergonómicos.

Estos riesgos se pueden traducir en: 

  • Posibles contagios por virus o parásitos.
  • Contacto con sustancias nocivas o tóxicas.
  • Sufrir cortes o pinchazos.
  • Exposición a radiaciones.
  • Sobreesfuerzos por manipulación de cargas e incluso personas.

Se trata solo de algunos ejemplos de los muchos riesgos que puede entrañar el trabajo en el sector sanitario

Principales equipos de protección individual en el sector sanitario

Los equipos de protección individual (EPI) deben ser usados conjuntamente con un plan de prevención adecuado y equipos de protección colectiva. Los EPIs son la última barrera de defensa, en caso de que los riesgos de lesión no puedan eliminarse totalmente mediante otras medidas de protección. Es importante realizar revisiones rutinarias de todo el equipamiento para asegurar que sigue funcionando correctamente. 

  • Protección respiratoria
  • Hay una amplia variedad de opciones en la protección respiratoria. Esta protección debe ser escogida en función del riesgo al que vayamos a exponernos. Hay dos grandes grupos: equipos autofiltrantes y máscaras con filtros (para partículas o para gases y vapores).

    • Autofiltrantes: mascarillas reutilizables (R), desechables o no reutilizables (NR), con o sin válvula de exhalación, todas con niveles de protección comprendida entre FFP1 a FFP3 según la norma EN 149:2001+A1:2009.   
    • Máscaras con filtros: medias máscaras o máscaras completas con filtros intercambiables contra partículas(polvo y aerosoles) y agentes biológicos, y filtros contra gases y vapores. Ambos tipos de filtros pueden utilizarse simultáneamente (filtros combinados). En función del filtro estaremos protegidos frente a distintos agentes.

  • Protección ocular
  • En el sector sanitario la vía ocular puede actuar como lugar de accidentes laborales debidos a salpicaduras y/o proyecciones de líquidos. Es muy importante hacer uso de un EPI para la zona ocular que sea cómodo, homologado y tenga un tratamiento antiempañamiento

    La protección ocular puede ser de distintos tipos:

    • Gafas de seguridad de patilla: mayor ventilación y comodidad en cuanto a peso y usabilidad. 
    • Gafas de protección cerradas: mejor visión panorámica y máxima protección ocular.
    • Cubregafas de seguridad: la opción más cómoda si se usan gafas graduadas propias.
    • Pantallas faciales: garantizan una protección tanto a los ojos como al resto de la cara.

    Aquí tienes acceso a una selección de gafas especializadas para el sector sanitario.

  • Calzado de seguridad
  • Los profesionales de la sanidad realizan largas jornadas laborales, por lo que deben hacer uso de un calzado que garantice la comodidad y la transpirabilidad, que sean antibacterianos, resistentes a perforaciones,antideslizantes y, por supuesto, homologados. 

    La mejor alternativa son los zuecos, ya sean abiertos o cerrados. Los zuecos son un tipo de calzado que ofrece gran ligereza, son flexibles y permiten múltiples lavados.

  • Guantes de protección
  • Existen guantes que son tanto equipo de protección individual (EPI) como Producto Sanitario (PS), es decir, se denominan productos de uso dual. Los EPIs protegen al trabajador y los PS protegen al paciente. Están diseñados especialmente para prevenir transmisiones de agentes biológicos a ambos. 

    Los guantes de uso dual pueden ser de examen (estériles o no, Clase I) o quirúrgicos (estériles, Clase IIa).

    Hay que verificar en el marcado de los guantes o de su embalaje si protegen frente a bacterias y hongos (pictograma de riesgo biológico) y/o frente a virus (mismo pictograma con la palabra VIRUS bajo él).  

    Algunos de los materiales más comunes son:

    • Látex: buena barrera frente patógenos sanguíneos y otros agentes infecciosos. Pueden ser con o sin polvo.
    • Poliisopreno: alternativa al látex, protege ante microorganismos, fluidos y ciertos químicos y citostáticos.
    • Nitrilo: alternativa al látex, resistencia a productos químicos, agentes biológicos y pinchazos o arañazos.
    • Vinilo: tareas de corta duración y bajo riesgo, buena adaptabilidad a la mano.

  • Ropa de trabajo y uniformes sanitarios
  • Dentro de esta categoría hablamos de equipamiento como casacas, pantalones, pijamas, batas y buzos. No toda la ropa es necesariamente un equipo de protección: la ropa de protección (EPI) es aquella que protege a la persona que la lleva de algún riesgo. De todas formas, los uniformes sanitarios no dejan de ser importantes en el sector para transmitir profesionalidad y tranquilidad a los pacientes, lo que puede lograrse empezando por mostrar una imagen de limpieza e higiene.

    El vestuario puede ser moderno y elegante, pero hay que dar prioridad a prendas y equipamiento ergonómico, transpirable y que sea muy cómodo para no limitar el movimiento.

    Si te has quedado con ganas de saber más sobre los equipos de protección individual, no dudes en visitar safeguru.com. Si necesitas una consulta personalizada con uno de sus expertos, puedes conseguirla a través de su portal de contacto.

    Safeguru | Delivering a safer future

    Parche con válvula contra parche ventilado

    ¿Cuál es la diferencia entre el parche torácico con válvula y el parte torácico ventilado?

    La diferencia es la forma en que ambos sellos del pecho permiten que el aire y el líquido escapen de un tórax lesionado mientras evitan que el aire regrese a la cavidad torácica.

    Sabiendo como funcionan los perches torácicos, ¿por qué se prefieren los parches ventilados a los parches con válvulas?.

    Parches con válvula

    Un parche torácico con válvula, utiliza válvulas mecánicas unidireccionales para bloquear la entrada de aire al pecho. Las válvulas están diseñadas para cerrarse de forma predeterminada y abrirse cuando una cantidad muy pequeña de presión de aire se acumula detrás de la válvula. Una vez que la presión de aire se nivela con la presión que hay fuera del tórax, la válvula se cierra y bloquea la entrada de aire. 

    Parche con válvula de Sam Medical

    Parches ventilados

    Los parches ventilados están diseñadas para estar abiertos de forma predeterminada, lo que permite que el aire y el líquido pasen fácilmente a través de los canales laminares y se alejen de la lesión en el pecho. Los canales se cierra cuando se produce una presión negativa en el pecho, tirando de estos y el área de ventilación hacia abajo contra el sello del pecho o la piel con el objetivo de sellar la herida. En algunas ocasiones y en función de la calidad del producto, existe la posibilidad que se produzcan fugas de aire (permitiendo que el aire regrese al pecho)

    Hyfin Vent de North American Rescue

    Conclusión

    Las válvulas, aunque son más efectivas para mantener la presión intrapleural negativa que permitir la expansión parcial del pulmón, tienden a restringir el flujo de líquido a través de su estructura mecánica. Los sellos torácicos con ventilación laminar con los orificios de ventilación abiertos, pueden fluctuar, manteniendo una presión intrapleural negativa y además permitirán que los fluidos pasen a través de los canales laminares.

    Espero que os haya gustado este pequeño post y nos vemos en el siguiente:

    Referencias

    Adaptación de HH med corp.

    Intoxicación etílica y el grupo B

    Introducción

    En infinidad de ocasiones, nuestros amigos y familiares no sanitarios nos han dicho “para la borrachera lo mejor es la B12”, entre risas y alcohol. 

    La realidad es que en la urgencia y emergencia administramos muchas veces, de forma sistemática suero glucosado y vitaminas del “grupo B” como la Tiamina / Benerva (B1) y/o Piridoxina / Benadon (B6). Pero, ¿es correcto administrarlo de forma sistemática a todos los pacientes con intoxicación etílica? Vamos a verlo por partes:

    ¿Suero glucosado?

    – ¿Porqué usamos suero glucosado IV en las intoxicaciones etílicas?
    El alcohol puede generar hipoglucemias en el paciente, pero no mejora, ni empeora los efectos de la intoxicación.

    Vitaminas del grupo B

    – ¿Mejoran las vitaminas del grupo B la intoxicación etílica?
    La respuesta sencilla y rápida es NO. Tanto la B1 como la B6 y B12 no mejora el estado clínico de la intoxicación etílica. 

    Entonces, ¿nunca hay que usarla? La Tiamina (B1) esta indicada antes de la administración de suero glucosado en pacientes con alcoholismo crónico, para evitar la aparición de la Encefalopatía de Wernicke.

    Encefalopatía de Wernicke

    – ¿Qué es la Encefalopatía de Wernicke?
    Según el manual MSD; resulta de la ingestión o la absorción inadecuados de tiamina asociados con una ingesta continuada de hidratos de carbono. La circunstancia subyacente más común es el alcoholismo grave. El consumo excesivo de alcohol interfiere con la absorción de tiamina en el tubo digestivo y su almacenamiento hepático; la desnutrición asociada con el alcoholismo a menudo impide el aporte adecuado de tiamina.

    Tiamina

    – ¿Como se administra la Tiamina?
    100 mg IM o IV lento.

    Espero que os guste este nueva entrada. Nos vemos en la siguiente.

    Referencias

    https://www.msdmanuals.com/es/professional/temas-especiales/drogas-recreativas-y-tóxicas/encefalopat%C3%ADa-de-wernicke
    https://www.elsevier.es/es-revista-medicina-familia-semergen-40-articulo-tratamiento-intoxicacion-etilica-aguda-13085864
    https://www.murciasalud.es/preevid/21025#

    DESCOMPRESIÓN CON AGUJA

    Introducción

    Según guías #phtls, #altls, #tecc y #tccc, el lugar preferido para una descompresión con aguja es el 5º espacio intercostal (EIC) en la línea axilar anterior del lado afectado del tórax en el caso de NEUMOTÓRAX A TENSIÓN.

    ¿Por qué?

    • La evidencia sugiere que puede tener mayor éxito.
    • El grosor de la pared torácica en la región del 5º EIC es menor que en el 2º EIC.
    • Los autores señalaron que la descompresión con aguja estándar de 5 cm fallarían en el 42,5% en el 2º EIC, en comparación con el 16,7% en la línea axilar anterior en pacientes con traumatismo.
    • Otro estudio pero con cadáveres señaló que el 5º EIC tuvo un 100% de éxito, mientras que en el 2º EIC fue de 57,5 %.
    • La línea axilar anterior se considera más segura y eficaz.

    ¿Qué aguja?

    Independientemente del método elegido, la descompresión se debe realizar con aguja intravenosa de gran calibre (10 a 16 G) con una longitud mínima de 8 cm.

    • 10 G Air Release System de @northamericanrescue. Longitud de 8,3 cm.
    • 14 G de toda la vida. Longitud de 6,4 cm.
    Fuente: North American Rescue

    Espero que os haya gustado. Nos vemos en el siguiente.

    Referencias

    • NAEMT. TECC: Atencion Tactica a Victimas en Emergencias, Segunda Edicion.

    Comprobación de la Sonda nasogástrica

    Introducción

    ¿Realmente es una buena intervención el introducir aire con la jeringa a través de la sonda nasogástrica y auscultar?

    En nuestro trabajo diario, es común que introduzcamos aire a través de la SNG para comprobar su correcta colocación, pero tras revisar bibliografía al respecto, esta intervención NO sería la más adecuada e incluso contraindicada en varios artículos.

    Con este post quiero “abrir la mente” y huir del “siempre se hace así” para trabajar con la Evidencia en nuestro trabajo diario. 

    Revisiones

    Tras revisar varias revisiones sistemáticas, podemos concluir que las mejores intervenciones para la comprobación correcta de la SNG son:

    – La American College of Gastroenterology dice que “previo al inicio de la alimentación, se debería realizar una confirmación radiológica de la colocación”.
    – Uso de capnografía o capnometría colorimétrica para comprobar la correcta colocación.
    – Uso de la medición del pH del tubo si hay tiras de pH disponibles.

    NO se recomienda:
    – La inspección visual de aspirado y auscultación no son indicadores fiables de la colocación correcta y no debe confiarse en ellas.
    – No deberían usar el método auscultatorio (bolo de aire) o el burbujeo de agua (sostener el tubo bajo el agua) para determinar la ubicación del tubo.

    Espero que os guste y os sea de utilidad.

    Referencias

    • DynaMed Ipswich (MA): EBSCO Information Services. 1995 – . Record No. T360973, Enteral Nutrition Support in Adults; [updated 2018 Nov 30]
    • McClave SA, DiBaise JK, Mullin GE, Martindale RG. ACG Clinical Guideline: Nutrition Therapy in the Adult Hospitalized Patient. Am J Gastroenterol. 2016 Mar;111(3):315-34
    • Arnau-Alfonso JJ. Métodos para determinar la colocación correcta de una sonda nasogástrica tras su inserción en pacientes adultos. Best Practice. Enferm Clin. 2013;23(2):81–83.
    • https://www.murciasalud.es/preevid/23263.
    • Foto: Centro de Simulación Clínica de FUDEN.

    Hemorragia obstétrica

    Introducción

    La hemorragia obstétrica puede ser anteparto o postparto.

    La hemorragia postparto es una causa importante de morbimortalidad materna, siendo la 3-5 causa de mortalidad materna.

    El flujo de sangre a través de las arterias uterinas en el tercer trimestre es de unos 500-700 ml/min.

    Causas de hemorragia postparto

    Las causas de la hemorragia postparto se agrupan en las 4 “T”:

    • Tono: atonía uterina.
    • Tejidos: retención de productos.
    • Trauma: lesión del canal genital.
    • Trombina: alteraciones de la coagulación.

    Diagnóstico

    El diagnóstico según la Guía clínica se la SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia), propone más de 500 ml tras el parto vaginal, más de 1.000 ml tras la cesárea o aquella hemorragia que amenaza con generar una inestabilidad hemodinámica en la parturienta.

    Manejo

    1. Manejo universal: 10 UI de Oxitocina profiláctica IM o 3-5 UI IV.
    2. Otras medidas en función de la gravedad: transfusiones masivas, masaje uterino bimanual, ácido tranexámico, taponamiento y un largo etcétera.

    En la imagen de portada se ven 2500 ml de sangre sólo en las gasas. La sonda foley con el preservativo se utiliza cuando no se dispone de balón de Bakri o sonda de Sengstaken-Blakemore.

    ¿Os imagináis que esto sucede fuera del hospital con una pérdida de 700 ml de sangre por minuto?

    Referencias

    • Imagen: Twitter de @plaquetagen
    • Tobias P, Barras S. Manual del curso de hemorragia obstétrica. Fundación para el desarrollo de la enfermería.