Web de Enfermero de simulación. En ella encontrarás entradas de blog, manuales, infografías y un largo etcetera sobre simulación, urgencias, emergencias y atención al paciente crítico.
La cánula nasofaríngea es un dispositivo básico de la vía aérea que ofrece una forma efectiva de mantener una vía aérea permeable en pacientes inconscientes o con bajo nivel de consciencia que tienen en reflejo nauseoso. Este dispositivo se tolera mejor que la cánula orofaríngea (Guedel) en el caso que el paciente recupere el nivel de consciencia.
Medición:
La distancia de la nariz del paciente hasta el lóbulo de la oreja (no estirar la cánula al medir)
Procedimiento para insertarla:
1. Abra la vía aérea con maniobra de elevación del mentón o tracción mandibular. 2. Lubrique la cánula. 3. Inserte la cánula en la nariz en un ángulo de 90º con respecto al rostro. Evite apuntar hacia arriba en dirección a la parte superior de la cabeza. 4. Inserte la cánula hasta el reborde. 5. Utilice movimientos de rotación o de vaivén para facilitar su inserción. 6. Si no puede insertar la cánula, quítela e insértela en la otra fosa nasal. 7. Determine si hay intercambio de aire y verifique la colocación correcta escuchando y sintiendo el aire que entra y sale de la vía aérea.
Quien no ha tenido, en mayor o menor medida, relación con las suturas en su día a día laboral. Si aún no lo has experimentado, tranquilo, llegará el día y es importante que estés preparado.
Con este pequeño post quiero adentraros en el fantástico mundo de las suturas, haciendo un resumen de los diferentes tipos de suturas en función de la zona anatómica a suturar, las diferentes técnicas de anudado y la retirada de puntos.
No reabsorbibles: estos hilos no son degradados por el organismo y deben ser retirados. Esta indicado su uso en: suturas cutáneas que vayan a ser retiradas, en estructuras internas que necesitan tensión, como tendones y ligamentos, y para fijar drenajes a la piel. Los más utilizados:
– Seda: Mersilk,
– Poliamida: Ethilon, Nylon o Supramid
– Polipropileno: Prolene o el Surgilene.
Reabsorbibles: se caracterizan por desaparecer gradualmente del organismo, por lo que no hay que retirarlos. Los principales inconvenientes de estos hilos son que pierden la mayor parte de la fuerza prensil a los 60 días, aunque no se hayan reabsorbido, y que pueden provocar reacciones inflamatorias. Estan indicados para suturas profundas, mucosas, tejido celular subcutáneo y ligar vasos. Los más utilizados son:
Según su calibre: El grosor de los hilos viene determinado por su numeración en ceros.
“A más ceros, menor grosor”
Información de los paquetes de suturas
Caro I, Molina M.A. Material de suturas en la farmacia hospitalaria. El farmaceutico hospitales. 2012.
Zona anatómica a suturar
Eligiremos un tipo de sutura u otro en función de la zona anatómica a suturar. Como norma general, se usarán:
ZONA ANTÓMICA
SUTURA CUTÁNEA
Cuero cabelludo
Grapas. Sedas 2/0, 3/0
Cuello y cara
Sedas 4/0 a 6/0 Monofilamento 4/0 a 6/0
Tórax, abdomen, espalda y extremidades
Seda 3/0, 4/0 Monofilamento 3/0, 4/0
Tejido celular subcutáneo
Material reabsorbible de 3/0, 4/0 como el Dexon o Vicryl.
Técnicas de sutura
Las suturas quirúrgicas pueden ser discontinuas o continuas.
Suturas discontinuas
Se caracterizan por que cada punto es independiente del siguiente, repartiendose uniformemente a lo largo de la herida a suturar. Siendo más fácil distribuir la tensión, favoreciendo el drenaje de la herida y son más fáciles de retirar. Este tipo de puntos son los más empleados. Algunos tipos de suturas discontinuas son:
Punto simple:
Punto simple con nudo enterrado:
Punto colchonero vertical:
Punto colchonero horizontal:
Punto colchonero horizontal semienterrado:
Suturas continuas
Se caracterizan por que se realizan en un solo tiempo, sin cortar el hilo, cerrando la herida completa con solo dos nudos, uno al principio y otro al final. Esto hace que la retirada del punto entrañe mayor dificultad. Este tipo de sutura tiene un buen resultado estético, pero está contraindicando en caso de infección en la zona de la sutura. Los tipos de suturas continuas son:
Punto continuo simple:
Punto continuo bloqueante:
Sutura intradérmica:
Retirada de puntos
El tiempo de retirada irá en función de la zona anatómica y la tensión de la herida. Por norma general, se retirarán los puntos:
ZONA ANATÓMICA
RETIRADA DE PUNTOS
Cuero cabelludo
8-10 días
Cuello y cara
4-6 días
Tórax, abdomen, espalda y extremidades
8-12 días
Recordad que cuanto más se practique, más destreza tendremos y mejores resultados ofreceremos a nuestros pacientes.
Espero que os haya gustado este post y haya quedado un poco más claro el estupendo mundo de las suturas.
Para realizar los videos, he contado con la ayuda de More Than Simulators, que me han dejado el SkinPad y el kit de suturas. Si quieres solicitar información del producto, puedes realizarlo a través de este formulario.
SkinPad y Kit de suturas de More Than Simulators
Nos vemos en el siguiente post.
Referencias bibliográficas.
Arribas Blanco, J.M. Cirugía menor y procedimientos en medicina de familia. Ed: Jarpyo. Madrid 2000.
La valoración del nervio óptico a través de la ecografía, nos permite una evaluación segura, rápida y fiable de la presión intracraneal en el paciente crítico.
En muchas ocasiones, en el entorno extrahospitalario o en el servicio de urgencias, la valoración del aumento de la presión intracraneal (PIC) se realiza por la clínica que presenta el paciente y/o por las lesiones potenciales. La triada de cushing (hipertensión arterial, bradicardia y bradipnea), es uno de los principales estándares que nos indica el aumento de la PIC.
La ecografía portátil nos permite una valoración rápida, fiable y segura del paciente crítico a pie de cama, en el medio hospitalario y extrahospitalario.
Muchos estudios hacen referencia al uso de la ecografía para medir el aumento de la PIC. Con este post pretendo dar una pequeña pincelada de la valoración del nervio óptico por ecografía en el aumento de la PIC.
Lo primero de todo, recordemos un poco la anatomía del Nervio óptico.
El nervio óptico se origina en la retina y se extiende hasta el quiasma óptico. Desde un punto de vista histológico y embriológico, constituye una prolongación del encéfalo y, por tanto, está rodeado por meninges hasta la parte posterior del globo ocular.
Fuente: Atlas de anatomía Humana. Frank H. Netter.
El nervio óptico tiene una longitud aproximada de 40 mm y un diámetro medio de 4 mm incluyendo la vaina externa e interna, siendo de 3mm sin las vainas. La vaina tiene un diámetro medio de 0,4 mm, lo que permite un compartimento subaracnoideo de 0,1 mm de ancho entre el nervio y la vaina. Este espacio subaracnoideo contiene aproximadamente 0,1 ml de líquido cefalorraquídeo.
La vaina del nervio óptico presenta un diámetro inicial que permanece constante siempre que la PIC se mantenga dentro de los límites normales. Cuando la PIC aumenta, el LCR fluye hacia el espacio subaracnoideo perineural y aumenta la presión del nervio óptico, aumentando el diámetro de la vaina del nervio óptico.
La visualización del nervio óptico a través de ecografía es una técnica no invasiva, segura y barata que ofrece una valoración del paciente crítico en el medio extra o intrahospitalario.
Para la visualización del nervio óptico es necesario altas frecuencias (>7,5 MHz) a través de un transductor lineal, lo que permite visualizar las estructuras con una alta resolución y una baja penetrancia.
El procedimiento, por norma general, será el siguiente:
Fuente: Optic nerve sonography: a new windows for the non-invasive evaluation of intracranial pressure in brain injury. Cálculo del grosor del nervio óptico a 3 mm.
El paciente tiene que tener los ojos cerrados.
Aplicar gel sobre el ojo.
Se valorará el nervio óptico con el transductor en posición transversa y longitudinal.
No se debe realizar excesiva presión sobre el ojo, para lo cual se recomienda apoyar el 5º y 4º dedo sobre el paciente.
Localizar el nervio óptico, midiendo 3 mm hacia su interior.
A los 3 mm, mediremos el diámetro de la vaina del nervio (ONSD de la imagen).
El nervio óptico y la PIC
La mayoría de los autores establecen el punto de corte del diámetro del nervio óptico en 4,5 mm para menores de 1 año y de 5 mm para mayores de un año. La mayoría de los estudios sugieren un aumento de la PIC > 20 mmHg en diámetros mayores de 5,7-6 mm. Los valores por encima de este umbral tienen que alertarnos por posible aumento de la PIC. En la práctica clínica se recomienda realizar la medición en ambos ojos, ya que el paciente puede presentar patología previa como papiledema o un diámetro aumentado de base.
Imagen A: Hematoma epidural / Imagen B: Ecografía del nervio óptico con diámetro de 8,11 mm. Fuente: Optic nerve sonography: a new windows for the non-invasive evaluation of intracranial pressure in brain injury. Emergency Medicine Journal
Espero que esta breve entrada os abra lo ojos a la gran importancia que tiene la ecografía en la atención del paciente crítico y los múltiples usos que tiene. La ecografía no sólo se limita al corazón, el abdomen o la obstétrica, es muchísimo más.
Nos vemos en el siguiente.
Referencias
T Soldatos, K Chatzimichail et al. Optic nerve sonography: a new windows for the non-invasive evaluation of intracranial pressure in brain injury. Emergency Medicine Journal. Volume 26, Issue 9. 2009.
Elevated intracranial pressure detected by bedside emergency ultrasonography of the optic nerve sheath. Acad Emer Med.2003;10:376-381.
Feneis H. Nomenclatura anatómica ilustrada. Ed 4. Masson 2000.
Netter F. Atlas de anatomía Humana. Ed 3. Masson 2003.
Cuando comenzamos a trabajar como enfermeros o en un servicio nuevo, el manejo de los distintos fármacos nos genera mucha inseguridad y preocupación. Con este post, pretendo resumir los principales fármacos que utilizamos en urgencias y emergencias de forma rápida y sencilla.
Por mi experiencia en servicios de urgencias y emergencias, no debemos olvidar las siguientes premisas:
Comprueba una y mil veces cómo se administra un fármaco en sitios o plataformas de referencia.
Huye del “esto siempre se pone así”. Busca la información del fármaco en fuentes fidedignas.
Mucha medicación que usamos en urgencias y emergencias, se puede poner en bolo e incluso sin diluir. En muchas ocasiones, diluimos los fármacos en exceso por miedo o desconocimiento, pudiendo provocar efectos secundarios en el paciente por la sobrecarga de líquidos que estamos administrando con las diluciones.
Administración: sin diluir, administrar de forma lenta, de 20 a 40 mg cada 10 segundos.
Notas: un truco para saber los mg es convertir el % en 0, es decir, el Propofol al 1%, será igual a 10 mg por ml. Si tengo la presentación de Propofol al 2%, serán 20 mg por cada ml.
MIDAZOLAM (15 mg en 3 ml)
Indicaciones: Sedante.
Dosis: 0,1 a 0,2 mg/kg.
Administración: Bolo lento. Administración lenta. Se recomienda 1 mg en 30 seg. Vía intranasal: 0,5 mg/kg. Ver vídeo de ejemplo.
Observaciones: se recomienda diluir el fármaco a 1 mg cada ml de la jeringa.
Preparación del Midazolam.
KETAMINA (500 mg en 10 ml)
Indicaciones: Anestésico general. Recomendado en broncoespasmos, pacientes asmáticos, quemados, inestabilidad hemodinámica, etc.
Dosis: 1-2 mg/kg.
Administración: Bolo lento en 60 segundos.
Observaciones: Se puede poner por vía intranasal: 5 mg/kg.
Relajantes Musculares
SUCCINILCOLINA (100 mg en 2 ml)
Indicaciones: Relajante muscular despolarizante.
Dosis: 1 a 1,5 mg/kg.
Administración: Bolo directo.
Observaciones: está en nevera. Contraindicado en quemados, lesión medular y síndrome de aplastamiento.
ROCURONIO (50 mg en 5 ml)
Indicaciones: Relajante muscular NO despolarizante.
Dosis: 1 mg/kg.
Administración: bolo directo.
Observaciones: está en nevera.
Analgésico
FENTANILO (150 mcg en 3 ml)
Indicaciones: Analgésico opiáceo.
Dosis: 0,5 a 2 mcg/kg.
Administración: Bolo lento en 2-3 min.
Observaciones: Se puede administrar vía intranasal a 2 mcg/kg.
Analgésicos más usados en urgencias y emergencias
Analgésicos menores
PARACETAMOL (1 g. en 100 ml)
Indicaciones: analgésico y antipirético.
Dosis: 1 g.
Administración: en 15 minutos.
Observaciones: puede generar hipotensión arterial.
KETOROLACO (30 mg en 1 ml)
Indicaciones: AINE. Analgésico y antiperético.
Dosis: 30 mg.
Administración: Se pude administrar en bolo lento, no menos de 15 segundos.
METAMIZOL (2 g. en 5 ml)
Indicaciones: Analgésico.
Dosis: 20-40 mg/kg.
Administración: Diluir en 100 cc de SSF a pasar en 10-30 minutos.
Observaciones: Control de la tensión arterial.
ACETILSALICILATO DE LISINA (900 mg)
Indicaciones: Analgésico y antiagregante plaquetario, antipirético y antiinflamatorio.
Dosis: 900 mg
Administración: Diluir en 100 ml a pasar en 30 min.
Analgésicos mayores
CLORURO MÓRFICO (10 mg en 1 ml)
Indicaciones: Analgésico opiáceo.
Dosis: 3-5 mg cada 5-30 min.
Administración: Bolo lento. 2 mg cada minuto. Se recomienda diluir la preparación a 1mg cada ml.
Observaciones: fotosensible. Administrar solo.
Notas: Precaución con la presentación, ya que existe la presentación de 10 mg en 1 ml y de 1 mg en 1 ml.
Fuente: Instagram @enfermerodesimulacion.
MEPERIDINA (100 mg en 2 ml)
Indicaciones. Analgésico opiáceo.
Dosis: 1-2 mg/kg
Administración: bolo lento en 1-2 min en 10 ml de SSF.
FENTANILO (150 mcg en 3 ml)
Indicaciones: Analgésico opiáceo.
Dosis: 0,5 a 2 mcg/kg.
Administración: Bolo lento en 2-3 min.
Observaciones: Se puede administrar vía intranasal a 2 mcg/kg.
Combinación de fármacos
La combinación de analgésicos mayores y/o menores, nos permite mejorar la analgesia del paciente. El protocolo del SAMUR-PC, propone la siguiente guía de administración:
Dolor leve (puntuación escala numérica 0-3)
Analgésicos menores solo.
Dolor moderado (puntuación escala numérica 4-6)
Analgésicos menores combinados.
Ketorolaco + Paracetamol.
Metamizol + ketorolaco.
Añadir Midazolam a dosis 0,02 a 0,05 si es necesario.
Dolor intenso (puntuación escala numérica 7-10)
Analgésicos menores combinados y analgésicos mayores.
Ketorolaco + Paracetamol + Fentanilo.
Se puede añadir Midazolam a dosis 0,02 a 0,05 si es necesario.
Valorar el nivel del dolor, pudiéndose repetir dosis de Fentanilo a 0,5 mcg/kg.
Inestabilidad hemodinámica y dolor intenso
AINES combinados + opiáceos.
Paracetamol + Fentanilo
Valore Medazolam a 0,01 mg/kg.
Antiarrítmicos
Que mejor forma de ver los antiarrítmicos que con la estupenda infografía de @enfermeracreativa, que nos resume la Clasificación de antiarrítmicos de Vaughan Williams.
Os resumo los principales antiarrítmicos más usados en los servicios de urgencias y emergencias.
PROCAINAMIDA (1g en 10 ml)
Indicaciones: Taquiarritmias.
Dosis: 50-100 mg cada 5 minutos.
Administración: Diluir la dosis inicial en 50 ml de glucosa al 5%. Se recomienda pasar de forma lenta con monutorización.
LIDOCAINA 2% (200 mg en 10 ml)
Indicaciones: Antiarrítmico.
Dosis: 2-4 mg/min. 60-120 ml/h
Administración: 10 ml al 2% en 90 ml de Glucosado al 5%.
DIFENILHIDANTOINA (FENITOINA 250 mg en 5 ml)
Indicaciones: antiarrítmico.
Dosis: 100 mg.
Administración: 100 mg en 100 ml de SSF en 1 minutos.
PROPAFENONA (70 mg en 20 ml)
Indicaciones: antiarrítmico.
Dosis: 1-2 mg/kg.
Administración: Diluir en glucosa al 5%. Administración lenta en 5 minutos.
Observaciones: control hemodinámico.
FLECAINIDA (150 mg en 15 ml)
Indicaciones: Arritmias supraventriculares.
Dosis: 2 mg/kg.
Administración: Diluir en 100 ml de glucosado al 5% a pasar en 15-20 minutos.
AMIODARONA (150 mg en 3 ml)
Indicaciones: Acción en aurículas y en ventrículos.
Dosis inicial: 300 mg.
Administración: en 100 ml de glucosado al 5% en 10-15 minutos.
Observaciones: Explicar al paciente los efectos secundarios del fármaco.
VERAPAMILO (5 mg en 2 ml)
Indicaciones: TSV, FA, flutter.
Dosis: 0,15 mg/kg.
Administración: Bolo lento a pasar en 2-3 minutos. Diluir 1 ampolla hasta 5 ml para concentrar 1mg/ml.
DILTIAZEM (25 mg)
Indicaciones: FA, Flutter, Taquicardia supraventricular paroxística que no cede con adenosina.
Dosis: 0,25 mg.
Administración: Diluir en 50 ml y pasar en 2 minutos.
Antihipertensivos
NITROGLICERINA (50 mg en 10 ml o 5 mg en 5 ml)
Indicaciones: Vasodilatador.
Dosis: 50 mg en 250 ml de glucosado al 5%
Administración: 1-3 ml/h en suero glucosado, aumentando en 2-3 ml/h.
Observaciones: fotosensible. No administrar en pacientes que han tomado inhibidores de la fosfodiesterasa (disfunción eréctil), bradicardia o hipotensión.
LABETALOL (100 mg en 10 ml)
Indicaciones: Antihipertensivo.
Dosis: 20 mg.
Administración: Bolo lento.
Observaciones: no levantar al paciente durante el tratamiento.
URAPIDIL (50 mg en 10 ml)
Indicaciones: Antihipertensivo.
Dosis: 12,5 mg – 25 mg – 50 mg.
Administración: Bolo en 20 segundos.
Fibrinolíticos
ALTEPLASA (50 mg en 50 ml)
Indicaciones: Fibrinolítico.
Dosis:
IAM: 70-100 mg.
ICTUS y TEP: 0,9 mg/kg (máximo de 90 mg)
Administración:
IAM: Pasar en 90-180 minutos, los primeros 10 mg se administra en bolo
ICTUS y TEP: Administración durante 60 minutos, con un 10% de la dosis total administrada en bolo.
Observaciones: Conservar por debajo de los 25ºC.
Fuente: CIMA
TENECTAPLASE (10.000 UI)
Indicaciones: Tombolítico.
Dosis:
<60 kg: 6.000 UI o 30 mg.
60-70 kg: 7.000 UI o 35 mg.
70-80 kg: 8.000 UI o 40 mg.
80-90 kg: 9.000 UI o 45 mg.
>90 Kg: 10.000 UI o 50 mg.
Administración: Bolo en unos 10 segundos. NO diluir en glucosa.
Hemostáticos
ÁCIDO TRANEXÁMICO (500 mg en 5 ml)
Indicaciones: Antifibrinolítico. Tratamiento precoz de las hemorragias traumáticas.
Dosis: 1 g.
Administración: en 100 ml en 10 minutos.
Fármacos del aparato digestivo
Antieméticos
METOCLOPRAMIDA (10 mg en 2 ml)
Indicaciones: Antiemético y procinético.
Dosis: 10-20 mg.
Administración: Sin diluir. Para dosis > 10 mg, diluir en 50 ml.
Notas: Las reacciones extrapiramidales se presentan en un 1-9% de los pacientes.
ONDANSETRÓN (8mg en 4 ml)
Indicaciones: antiemético.
Dosis: 8 mg.
Administración: Se puede diluir en 10 ml a pasar en unos 5 minutos (se recomienda en un suero de 50 ml)
Inhibidor de la Bomba de protones
OMEPRAZOL (40 mg)
Indicaciones: protector gástrico.
Dosis: 40-80 mg.
Administración: Diluir en 100 ml de SSF en 20-30 min.
Nota: Se recomienda su uso en combinación con la Dexclorfeniramina (Polaramine) en reacciones alérgicas.
Hormonas
SOMATOSTATINA (3 mg)
Indicaciones: hemorragias digestivas causadas por varices esofágicas sangrantes.
Dosis: Inicial de 0.25 mg.
Administración: Diluir 3 mg en 6 ml de SSF (0,5mg/ml) y administrar 0,5 ml en al menos 3 minutos.
Diuréticos
MANITOL 20% (50 g. en 250 ml)
Indicaciones: Diurético osmótico.
Dosis: 0,5 – 1 g/kg.
Administración: administrar en 20 minutos.
Notas: si es al 20%, en cada ml tenemos 200 mg.
FUROSEMIDA (20 mg en 2 ml)
Indicaciones: Diurético de Asa.
Dosis: 20-80 mg
Administración: Sin diluir. Administración lenta.
Observaciones: mantener protegido de la luz. Control de TA.
Simpaticomiméticos
ADRENALINA (1 mg en 1 ml)
Indicación: Tanto para ritmos desfibrilables (FV y TVSP) como no desfibrilables (asistolia y AESP)
Dosis: 1 mg cada 3-5 min.
Administración: en bolo, sin diluir. Seguido de embolada de suero rápida.
NORADRENALINA (10 mg en 10 ml)
Indicaciones: Hipotensión aguda.
Dosis: 0,1 – 0,5 mcg/kg/min.
Administración: 20 mg en 80 ml de glucosa al 5%. Inicio a 4 ml/h hasta 25 ml/h (70-80 kg)
Observaciones: Fotosensible.
Notas: para urgencias y emergencias, se puede administrar por vía periférica.
DOPAMINA (200 mg en 10 ml)
Indicaciones: aumenta el gasto cardiaco, la TA y FC. Vasocontricción renal.
Dosis: 5 – 20 mcg/kg/min.
Administración: 200 mg en 90 ml de Glucosado al 5% a 10-40 mcg/min.
DOBUTAMINA (250 mg en 20 ml)
Indicaciones: Soporte inotrópico del miocardio en tratameinto de insuficiencia cardíaca aguda.
Dosis: 5 mcg/kg/min.
Administración: 250 mg en 250 ml de glucosado al 5%. Ajustar ml al peso.
Observaciones: NO mezclar con bicarbonato.
SALBUTAMOL (0,5 mg en 1 ml)
Indicaciones: Broncodilator. Status asmático.
Dosis: 4 mcg/kg.
Administración: Diluido en SSF o Dx5% a pasar en 20 min. Si se administra IM o SC, 8 mcg/kg. Media ampolla en cada brazo.
Nota: de elección en pacientes aislados con COVID-19 donde no es posible la nebulización.
Parasimpaticolítico o anticolinérgico
ATROPINA (1 mg en 1 ml)
Indicaciones: Bradicardia, intoxicación por organofosforados.
Dosis: 0.5 mg cada 3-5 min.
Administración: Sin diluir en bolo. Máximo de 3 mg.
Observaciones: En intoxicación por organofosforados, no hay máximo, se puede repetir dosis de 1-2 mg cada 10 minutos hasta la atropinización.
Nota: Por debajo de 0,5 mg produce efecto paradójico y bradicardiza. No efectivo en bloqueos de alto grado como el bloqueo AV completo o el Bloqueo de segundo grado tipo II.
Corticoides
HIDROCORTISONA (100 mg)
Indicaciones Reacciones alérgicas graves, anafilaxia, crisis asmática, edema de glotis, como hipotiroideo.
Dosis: 2 mg/kg.
Administración: Bolo lento de 3-4 min.
Observaciones: Se recomienda diluir en 100 ml para evitar el prurito perineal si la situación lo permite.
METILPREDNISOLONA (8, 20, 40, 500 mg)
Indicaciones: Broncoespasmo, anafilaxia, hipercalcemia tumoral, exacerbación del EPOC.
Dosis: 0.5-2 mg/kg.
Administración: Administrar en 1-2 min. Se puede administrar con la dilución del disolvente.
Dosis: En función de la patología. 10-20 mg en edemas y antiemético como dosis iniciales.
Administración: sin diluir. Si la situación lo permite, diluir en 50 ml a pasar en 15 minutos.
Intoxicaciones
FLUMAZENILO (0,5 mg en 5 ml)
Indicaciones: intoxicación por Benzodiacepinas.
Dosis: 0,3 mg.
Administración: Bolo directo en 15 segundos.
Observaciones: máximo 3 mg.
NALOXONA (0,4 mg en 1 ml)
Indicaciones: intoxicaciones por opiáceos.
Dosis: 0,8 mg, dosis repetidas de o,4 mg cada 2-3 min.
Administración: Bolo lento.
TABLA DE ANTÍDOTOS
TÓXICO
ANTÍDOTO
Benzodiacepinas
Flumazenilo
Betabloqueantes
Glucagón
Calcioantagonistas
Cloruro Cálcico al 10%
Digoxina
Anticuerpos antidigital
Drogas anticolinérgicas
Fisostigmina
Bloqueantes dopaminérgicos
Biperideno
Heparina
Protamina
Insulina
Glucosa
Metahemoglobinemia
Azul del Metileno
Metanol
Fomepizole / Etanol
Opiáceos
Naloxona
Organofosforados
Atropina
Paracetamol
N-acetilcisteina
Yodo
Almidón
Tabla extraída de: Manual de urgencias y emergencias para enfermería de FUDEN
Compatibilidades.
Como las compatibilidades en Y es un tema que daría para otra entrada y no os quiero aburrir mucho, os adjunto algún recurso que hay en la red para que sea más fácil la administración en “Y” de fármacos, sobre todo en las Unidades de Cuidados Intensivos.
Una tabla que me gusta mucho para diluciones es la que tiene el SAMUR-PC en sus procedimientos. Es una tabla muy orientada a urgencias y emergencias y deja muy clara la dilución. Aquí podéis descargarla.
Recursos electrónicos.
Cuando no manejamos un fármaco de forma habitual, se recomienda acudir a recursos donde te indiquen la administración, dosis, dilución, etc. del fármaco. Algunos de los recursos que más utilizo son:
Os dejo la Guía rápida de fármacos parenterales en emergencias para ampliar información. Guía.
Con esta entrada he querido reflejar los fármacos más utilizados en urgencias y emergencias en situaciones de urgencias y emergencias, como es lógico, se utilizan muchos más fármacos y en cada centro y/o unidad, las diluciones se realizan de una forma u otra.
Espero que esta entrada del Blog os sea de utilidad. Un abrazo y hasta la siguiente.
Una de las partes más complicadas en simulación es pasar de lo escrito a la realidad. Muchas veces pensamos que realizar simulación clínica es hacer casos con un maniquí e ir modificando el escenario sobre la marcha, pero requiere un proceso más elaborado, sobre todo, si quieres conseguir una serie de objetivos planteados con los alumn@s. Por mi experiencia, suelo tardar unas 24 horas en elaborar un caso de simulación.
Como vimos en la primera parte de la línea de “la simulación no es un juego”, la Universidad de Manresa en su documento “Diseño y planificación de experiencias de simulación”, nos propone unos pasos en el diseño y la planificación de la experiencia en simulación clínica, estos puntos se pueden resumir en el siguiente esquema:
Esquema del diseño de la simulación. Elaboración propia. Fuente: Camps A., Dalmau O. Diseño y planificación de experiencias de simulación. Universidad de Manresa
Vamos a ver, de forma resumida, cada punto
A. Idea inicial.
Las ideas de una nueva formación no siempre son personales, hay muchos factores que pueden influir en la generación de ideas o propuestas iniciales, muchas de ellas de gran utilidad, pero otras no tan factibles de poner en práctica. Yo, por ejemplo, utilizo mucho el Instagram para preguntar a los profesionales sanitarios sobre los cursos que les gustaría hacer y conocer de primera mano sus necesidades, siendo una gran fuente de información, a pesar de que alguna de las ideas no se pueden realizar por recursos/presupuesto.
Podemos diferenciar tres grupos principales de obtención de datos; organizaciones, personas y documentos.
Obtención de datos. Elaboración propia. Fuente: Camps A., Dalmau O. Diseño y planificación de experiencias de simulación. Universidad de Manresa
B. Análisis de las necesidades.
Una vez que tengamos la propuesta formativa, vamos a analizar si son viables o no. En este punto entran en juego muchos factores como por ejemplo:
Necesidades de la organización.
Necesidades de los participantes.
Viabilidad económica.
Recursos materiales y personales necesarios.
Público objetivo.
Acreditación.
Y un largo etcétera.
Muchas veces pensamos que una actividad formativa es genial y que tendrá mucha demanda, pero a la hora de la realidad, tiene muy poca aceptación, momento que tienes que volver a analizar ¿qué ha fallado?
C. Objetivos y resultados esperados.
Poder medir los resultados es muy importante para analizar cambios, mejoras y para determinar el impacto de las experiencias basadas en la simulación. El modelo de Kirkpatrick es un modelo que evalúa los programas de entrenamiento y la trasferencia de resultados de aprendizaje. Este modelo muestra cuatro niveles secuenciales de evaluación:
Pirámide del modelo de Kirkpatrick
Reacción: mide la satisfacción del participante con la capacitación.
Aprendizaje: mide el conocimiento, las habilidades y las actitudes obtenidas de la capacitación.
Cambios en las medidas de comportamiento que se produjeron como resultado de la capacitación.
Resultados: mejorando la calidad y la seguridad; mayor retorno de la inversión después de capacitación, como productividad, ingresos, etc.
Cuando hemos determinado las medidas de resultado de la simulación, el próximo paso es desarrollar objetivos. Los objetivos son las herramientas de orientación para facilitar el logro de los resultados esperados en la simulación.
Para tener resultados alcanzables, son necesarios objetivos medibles, claramente definidos. En este punto, un recurso muy bueno es utilizar la metodología SMART. Esta metodología se utiliza para escribir objetivos que se centran en los KSA (Knowledge, Skills and Attitudes – Conocimiento – Habilidad – Actitudes) deseados que los participantes en la simulación deben demostrar al completar la simulación.
Metodología SMART
Resumen metodología SMART. Fuente: INACSL
Además del SMART, tenemos que definir qué objetivos principales de simulación queremos hacer, es decir, si nos centraremos en objetivos técnico-asistenciales (técnicas, procedimientos, habilidades, etc.) o en objetivos no técnicos (comunicación, liderazgo, análisis, CRM*, etc.) *CRM: Crisis Resource Management (os hablaré algún día de esto 😉)
D. Diseño de la actividad.
Uno de los retos más importantes para el diseño de la actividad, es plantearnos en qué zona de simulación nos encontramos. Muchas veces, cuando los alumnos son de postgrados, el grupo puede ser muy heterogéneo, por lo que los ritmos de aprendizaje pueden variar mucho de un alumno a otro.
Zona 0: El alumno recibe feedback automático. Se usa plataformas virtuales, realidad virtual, programas de simulación en el ordenador, etc.
Zona 1: Desarrollo de destrezas clínicas. Se entrena técnicas y procedimientos. El instructor orienta y da feedback al alumno.
Zona 2: Los alumnos participan en escenarios donde el paciente se deteriora.
Zona 3: Se entrena el desarrollo en equipo, factores humanos, CRM.
Zona 4: Utilización del debriefing en la práctica clínica real.
Zonas de Simulación. Fuente: Curso de instructores. Universidad Francisco de Vitoria
Generalmente, los alumnos con más experiencia/expertos, suelen trabajar en zonas de simulación altas, trabajando la dinámica de equipo que suele ser el principal problema de la actividad asistencial real.
En muchas ocasiones, sobre todo cuando se empieza en este maravilloso mundo de la simulación, queremos hacer casos muy complejos y el alumno se pierde en los escenarios, ya sea por la complejidad del caso, por sus competencias o por la falta de experiencia.
Como hemos dicho antes, en un curso de postgrado los alumnos son muy heterogéneos, por lo que para llegar a las zonas altas en simulación propongo ir de menos a más de forma paulatina, adaptándonos al ritmo de aprendizaje de cada alumno. Un ejemplo puede ser:
Zona 0: Campus virtual con documento de estudio, videoformación, clases virtuales en directo con el instructor, casos clínicos, etc.
Zona 1: Entrenar técnicas. En las primeras sesiones presenciales los alumnos realizarán técnicas que posteriormente serán utilizadas durante la simulación, como la colocación de un dispositivo supraglótico, el uso del ecógrafo, la canalización de un catéter PICC sobre simulador, etc.
Zona 2: Casos clínicos donde el paciente se va deteriorando, entrenando los algoritmos, procedimientos, etc. En esta fase, el alumno toma contacto con la sala de simulación.
Zona 3: Casos clínicos en los que se entrenan los factores humanos, como la comunicación, necesidad de recursos, pedir ayuda y un largo etcétera. Es muy recomendable tener en la sala un miembro del equipo de facilitadores, lo que llamamos confederado. Esta figura ayudará durante la simulación dentro de la sala como, por ejemplo, siendo el TCAE que nos ayuda a localizar el material, etc.
E. Diseño de escenarios.
Uno de los puntos que más me gusta es el diseño de los escenarios, ya que, es donde puedes poner toda tu imaginación y destreza. Como vimos en el post anterior, tenemos que plasmar la fidelidad en el escenario para que los alumnos se metan en la simulación y generemos un alto grado emocional, es decir, que el alumno se crea que esta con un paciente real, en un entorno simulado.
Fielidad en simulación. Elaboración propia.
Para conseguir este estímulo emocional, Russell nos plantea un modelo dimensional. En los casos, intentaremos que la emoción de los alumnos esté en el cuadrante positivo y activo.
Modelo dimensional de Russell. Fuente: Elaboración propia. Fuente: Camps A., Dalmau O. Diseño y planificación de experiencias de simulación. Universidad de Manresa
En una ocasión, en un curso de emergencia obstétrica, una alumna ante unas desaceleraciones bruscas en el registro cardiotocográfico y ante la necesidad urgente de una cesárea, decidió quitar el freno a la cama y llevarla al quirófano. Cuando se dio cuenta que no estaba en su hospital, se quedo sorprendida de cómo había tenido una “pérdida situacional”. Esto se puede conseguir trabajando la fidelidad de los escenarios de simulación.
Escenario de hemorragia obtétrica tras una simulación. Paritorio del CSC de FUDEN
Cuanto más real sea el caso que realicemos, mayor aprendizaje para los alumnos. Lo mejor para conseguir esto, es llevar a la simulación nuestros casos reales.
En muchas ocasiones, pecamos de realizar los casos demasiado complejos y elaborados, sin objetivos claros, produciendo estrés en los alumnos que participan en la simulación, como se refleja en la Ley de Yerkes-Dodson. Nuestro objetivo es conseguir que el grupo se sienta en el límite de su zona de confort para favorecer así al aprendizaje, no en superarlo.
Trabajar en los límites de la zona de confort puede generar el error y suponer un desafío para los participantes. El error lo consideraremos como una grandísima herramienta de aprendizaje, que analizaremos en los próximos días en un post sobre el debriefing.
“Tú mejor maestro es tu último error”.
Ralph Nader
Esquema de rendimiento óptimo. Fuente: lamentemaravillosa.com
Supongo que a estas alturas del post te está empezando a entrar vértigo. Tu tranquilo, en este proceso no estarás solo, o no deberías 😉. En la elaboración de un escenario de simulación participan más personas. Vamos a verlos:
Instructor-facilitador: es la mente del proceso, participa y conoce todos los procesos de la simulación. Como nos indica el documento de la Universidad de Manresa, tiene diferentes habilidades:
Diseño de escenarios: planifica el desarrollo del escenario acorde a los objetivos planteados.
Pedagógicas y didácticas: favorece todos los procesos cognitivos relacionados con el aprendizaje.
Conducción y dinamización del grupo: dinámicas que favorecen la creación de grupo entre los participantes. Ideales para el inicio de la formación, lo que denominamos “dinámica rompehielos”.
Comunicativas y relacionales: coaching, PNL, reconducir conversaciones complejas, tener la capacidad para “abrir melones” y sobre todo, cerrarlos, durante la fase de análisis, etc.
Expertos y docentes colaboradores: en muchas ocasiones el instructor no es experto en todas las materias, es muy bueno que los casos estén revisados por docentes expertos para que revisen los aspectos más clínicos del caso y la secuencia de evolución.
Personal de apoyo: como técnicos en simulación, maquilladores, actores y un largo etcétera que pueden ser partícipes en el escenario simulado. En los cursos de politrauma por ejemplo, hablo con la maquilladora para ver si es viable el moulage (maquillaje) de los actores en cada caso, así no perdemos la fidelidad del escenario.
Escenario de emergencia obstétrica en el Paritorio del CSC de FUDEN.
La mayoría de los Centros de simulación utilizamos una plantilla para el desarrollo de los escenarios. En nuestro caso, en el Centro de Simulación de FUDEN, usamos dos, una que es muy detallada y otra resumida que utiliza el operador del maniquí. El objetivo de la plantilla de simulación es que independientemente del instructor que realice el caso, se haga de la misma manera. En la plantilla se recogen datos como: material necesario, qué hace el simulador en cada momento, qué hacemos si los alumnos hacen una cosa u otra y un largo etcétera.
Es muy importante que los instructores prueben el escenario antes de hacerlo con los alumnos, para ver fallos y mejoras en la programación de los casos.
Ejemplo de plantilla de casos. Elaboración propia.
Si sigues leyendo hasta aquí, es que no te he aburrido demasiado. El siguiente punto es el más bonito y el que, particularmente, me sigue generando un hormigueo en el estómago aunque lo haya hecho cientos de veces; la puesta en marcha del escenario de simulación con los alumnos.
La simulación. La teoría cobra vida.
La simulación clínica se suele dividir en tres fases: breafing, simulación y debriefing:
Breafing: esta es una de las fases claves de la simulación. El objetivo del breafing o prebriefing es generar un entorno seguro de aprendizaje y reducir el estrés de los alumno. Nosotros solemos utilizar varios contratos verbales. Los solemos explicar al inicio del curso y recordar antes de la simulación:
Contrato de confidencialidad: Los alumnos se compromete a no revelar los casos y las actividades que se realicen durante la simulación.
Contrato “Las Vegas”😉: para favorecer un ambiente de aprendizaje, es necesario que los alumnos se sientan seguros. Tenemos que crear un clima de confianza, en el que pueden aprender de los errores y no ser juzgados en ningún momento. “Lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas. Lo que pasa en la sala se simulación, se queda en la sala de simulación”.
Compromiso de ficción: En el que nosotros nos esforzaremos en que los escenarios sean lo más reales posible, pero los alumnos tienen que dejar a un lado la incredulidad y pensar que es un paciente real. Meterse en el escenario de simulación.
Entorno: hay que explicar muy bien a los alumnos el entorno de simulación, qué pueden esperar del maniquí o el actor, qué pueden y qué no pueden hacer con él, cómo solicitar ayuda y un largo etcétera. Nosotros solemos dejar a los alumnos unos 10 minutos para que conozcan el entorno, toquen al maniquí, palpen pulsos, abran cajones, etc., para que hagan suya la sala de simulación.
Simulación: como os imagináis, es poner en marcha el escenario que hemos diseñado. Es la parte que más nervios genera a los alumnos y a nosotros, ya que, la simulación no esta exenta de errores y fallos, sobre todo técnicos. Es muy recomendable que haya dos instructores durante la simulación, uno de ellos se encargará de controlar el maniquí, si hay técnico en simulación mucho mejor. Y el otro instructor se encargará de observar el escenario. Podemos tener la figura del confederando, que estará dentro de la simulación para ayudar a los alumnos como vimos anteriormente. Se recomienda que el caso no este sujeto a la improvisación, que se tenga en la hoja del caso todas las reacciones que pueden tener los alumnos, lo más sencillo es hacerse un diagrama de flujo.
Debriefing: Este punto es uno de los pilares principales de la simulación. El análisis posterior del escenario de simulación. Por su gran importancia y para explicar los pasos y diferentes modelos, haré un apartado especial en otra publicación en los próximos días.
Este soy yo en el Puesto de Control del Centro de Simulación de FUDEN
“La experiencia sin reflexión no es experiencia. Es rutina, automatismo, es tu historia, el pasado. Por lo tanto, la experiencia no es lo que te ha pasado, sino lo que hace con lo que te ha pasado.”
Camps A., Dalmau O.
Espero que esta nueva entrada sobre simulación os haya gustado y sobre todo, os haya abierto los ojos al este estupendo mundo, el de la simulación clínica y que no tengáis la idea que simular es “jugar” con los maniquíes, ni hacer casos clínicos a lo loco.
En muchas ocasiones, se tiene el concepto de simulación clínica como “jugar con los maniquíes”. Con esa serie de posts, pretendo, de forma breve, mostrar un poco más el mundo de la simulación clínica y alguno de sus elementos básicos.
Lo primero de todo, es responder a una pregunta que me hace mucha gente cuando digo que me dedico a la simulación clínica, sobre todo personas que no tienen relación con el mundo de la sanidad.
¿Qué es la simulación clínica?
Según el Center for Medical Simulator de Boston, uno de los centros de simulación más importantes del mundo, definen la simulación como “una situación o un escenario creado para permitir que las personas experimenten la representación de un acontecimiento real con el fin de practicar, aprender, evaluar, probar o adquirir conocimientos de sistemas o de actuaciones humanas”.
Para ser más claros en la definición y más cercana, para mi, la simulación clínica nos permite entrenar situaciones reales en un entorno simulado con el objetivo de mejorar la seguridad clínica y la calidad de los cuidados que ofrecemos a nuestros pacientes.
“La simulación clínica nos permite entrenar situaciones reales en un entorno simulado con el objetivo de mejorar la seguridad clínica y la calidad de los cuidados que ofrecemos a nuestros pacientes”
Pero, esto de la simulación clínica ¿es algo nuevo?. Claro que no, vamos a hacer un pequeño repaso histórico de la simulación.
Un poco de historia.
Tenemos que recordar que la simulación clínica no es solo cosa de profesionales sanitarios o de la aviación (gran experiencia en simulación), los deportistas de élite, los bomberos, policías y un largo etcétera entrenan y practican todos los días en búsqueda de la excelencia, preparándose para las intervenciones o partidos reales. Y aquí me hago una pregunta. ¿por qué los futbolistas entrenan todos los días para un partido y nosotros que jugamos partidos todos los días, no entrenamos más? Es una buena reflexión que algún día profundizaremos.
Veamos los primeros maniquíes que se conocen en la literatura:
1700. Primeros simuladores obstétricos de M. Grégoire. Conocidos como Phantoms.
1778. La maquine de Madame Du Coudray. Simulación de parteras en Francia.
1877. Simulador obstétrico de Budin-Pinard. Busto de una mujer tallado en madera, en su interior se colocaba una bolsa de líquido que simulaba el líquido amniótico con un feto muerto dentro de ella.
1911. Mrs. Chase. Simulador utilizado en el hospital de Hartford en Connecticut. Ese simulador permitía poner inyecciones en los brazos, tenía depósitos internos para diferentes tratamientos, marcando un antes y un después en el uso de los simuladores clínicos.
1929. Primer simulador de vuelo de Edwin A. Link. El Link Trainer.
1950. Resusci-Anne de el juguetero noruego Asmund Laerdal. Famoso maniquí que podemos encontrar en muchos centros de formación y Universidades en nuestros días. Os recomiendo el genial hilo de @cateterdoblej (twitter) sobre la historia de Resusci-Anne.
1960. Sim One de Abrahamson y Denson con ruidos cardíacos y respiratorios.
1990-2020. Nacen los grandes simuladores que conocemos hoy en día los denominados de 3º y 4º generación como el SimMan de Laerdal, Meti, Gaumard, etc.
La Maquine. Madame Du Coudray
Simulador obstétrico de Budin-Pinard
Mrs. Chase
Foto La Maquine: http://www.arqueologiadelamedicina.com. Foto Budin-Pinard: A Historical Examination of the Budin-Pinard Phantom: What Can Contemporary Obstetrics Education Learn From Simulators of the Past? Foto Mrs. Chase: Simulation in Nursing.
La simulación no sólo es usar simuladores caros o aparatos complejo, hay varios tipos de simuladores en función de los objetivos. Vamos a verlo…
Tipos de simuladores.
Casos clínicos simulados escritos. Os paso el enlace de unos cuantos casos que hice 😉
Modelos en 3D.
Programas informáticos que simulan casos clínicos, utilizando en muchos casos la realidad aumentada o la realidad virtual.
Uso de pacientes estandarizados. Actores que simulan pacientes, se puede usar maquillaje (moulage) para dar mayor realismo a la simulación.
Maniquís de entrenamiento de tareas. Se denomina de “baja fidelidad o baja tecnología”.
Maniquís que simulan pacientes en entornos reales simulados. Los maniquís de “alta fidelidad o alta tecnología”.
Paciente estandarizado de politrauma.
Realidad virtual de Oxford Medical Simulator
La simulación clínica, aunque lleva muchos años de trayectoria, es relativamente reciente en nuestra práctica diaria y en la formación. Los Millennials (1981-1993) como yo, raros son los que realizaron prácticas en la Universidad con algún tipo de maniquí antes de ir al hospital a hacerlas in vivo, pobres pacientes que eran sometidos a mis primeras vías.
Pero no es oro todo lo que reluce, la simulación tiene sus ventajas y limitaciones.
Ventajas y limitaciones de la simulación clínica.
Ventajas
Limitaciones
– Adaptarnos a la velocidad de aprendizaje del alumno. – Entrenamiento integrador en el ámbito competencial. – Seguimiento en profundidad. – Permite medir la competencia. – Aumenta la seguridad de los participantes. – Experiencia inmersiva, interactiva y competitiva. – Anticipación de eventos. – Acelera la curva de aprendizaje.
– Alto coste en material. – Diferencia de la realidad profesional respecto a la simulación. – Ansiedad por sentirse observado. – Falta de participación activa. – Averías durante el proceso de simulación. – Falta de realismo.
Muchas veces pensamos que para simular es necesario maniquíes de alta tecnología, extremadamente caros, pero es un concepto que no es real. Se puede hacer simulación con muchos elementos, todo irá en función de tus objetivos y lo que quieras entrenar. Uno de los ejercicios de simulación que hago mucho, sobre todo al inicio de los cursos es la dinámica del “Helium Stick”. Con un simple palo, se entrena comunicación, roles, liderazgo y un largo etcétera que no desvelaré para generar expectativa a mis futuros alumn@s 😉
Dinámica del Helium Stik en el Centro de Simulación Clínica de FUDEN
¿Qué nos aporta la simulación clínica a los profesionales sanitarios?
Cuando hablamos de aprendizaje, los adultos estamos más interesados en estrategias centradas en los problemas que centrada en la materia. Edgar Dale muestra en su Pirámide del aprendizaje como recordamos y aprendemos los adultos:
Pirámide de Dale
La simulación clínica y sobre todo el debriefing o análisis posterior, aumenta la curva de aprendizaje, disminuyendo el tiempo que el alumno tarda en aprender.
Gráficos: Camps A., Dalmau O. El porqué de la simulación en la formación continua de los profesionales de la salud. Universidad de Manresa.
Esta curva de aprendizaje también la podemos conocer como escalera de aprendizaje, pasando del “no sé que no sé” al dominio de la competencia.
Escalera de aprendizaje
La simulación no es tener un maniquí o una sala y ponerse a hacer casos clínicos, es mucho más. Requiere muchos pasos previos para que esa simulación tenga éxito y consigamos los objetivos de aprendizaje que buscamos en los alumnos.
Antes de simular, vamos a diseñar y planificar.
Lo primero de todo es conocer los diferentes tipos de fiabilidad que utilizamos en simulación. Entendemos Fidelidad a “La capacidad de ver o representar las cosas tal como son para mejorar la credibilidad. El grado en que una experiencia simulada se aproxima a la realidad; a medida que la fidelidad aumenta, el realismo aumenta. El nivel de fidelidad está determinado por el entorno, las herramientas y los recursos utilizados, y muchos factores asociados con los participantes. La fidelidad puede involucrar una variedad de dimensiones”
Podemos dividir la fidelidad en:
Física: El simulador, entorno, moulge, etc. nos aproxima a la realidad.
Psicológica: Interacción del simulador o paciente estandarizado con los alumnos.
Conceptual: El caso que se reproduce tiene sentido.
Elaboración propia
El documento “El porqué de la simulación en la formación continuada de los profesionales sanitarios” de la Universidad de Manresa. Nos propone unos pasos en el diseño y planificación de la simulación clínica:
Idea o propuesta inicial.
Análisis de las necesidades.
Objetivos y resultados esperados.
Diseño de la actividad.
Diseño del escenario.
SIMULACIÓN:
Breafing.
Simulación.
Debriefing o análisis.
Trasferencia a la realidad.
Simman de FUDEN con sudor simulando un paciente en shock.
Se que te está apasionando el post, pero hablaremos de los elementos de diseño y el debriefing más en profundidad en los próximos días 😉
Espero que esta pequeña introducción te haya gustado y en los próximos días colgaré las siguientes partes.
Un abrazo.
Bibliografía de consulta:
Camps A., Dalmau O. El porqué de la simulación en la formación continua de los profesionales de la salud. Universidad de Manresa.
Owen, Harry MBChB, MD, FRCA; Pelosi, Marco A. II, MD A Historical Examination of the Budin-Pinard Phantom: What Can Contemporary Obstetrics Education Learn From Simulators of the Past?, Academic Medicine: May 2013 – Volume 88 – Issue 5 – p 652-656 doi: 10.1097/ACM.0b013e31828b0464
Owen H. (2016) Simulation in Nursing. In: Simulation in Healthcare Education. Springer, Cham
Video resumen del Algoritmo de paro cardíaco para profesionales sanitarios SVB/BLS de AHA.
Según la Fundación Española del Corazón, los paros cardíacos suponen entre 35.000 y 45.000 muertes al año en España y Europa, siendo la tasa de supervivencia del 11% (recuperación neurológica ad integrum) de los paros cardíacos producidos fuera del hospital.
Cada minuto que transcurre sin la intervención de un desfibrilador que recupere el ritmo normal del corazón, se reduce un 10% la probabilidad de supervivencia sin secuelas.
Secuencia de SVB/BLS para adulto con 1 reanimador.
1. Compruebe la seguridad de la escena.
Asegúrese que la escena es segura para usted y para la víctima. Recuerde:
“Los heroes muertos no salvan vidas”
2. Compruebe si la víctima responde.
Mueva a la víctima suavemente de los hombros y pregúntele si se encuentra bien.
3. Si la víctima no responde, solicite ayuda.
Active al equipo de paro cardíaco o si se encuentra sólo en el medio extrahospitalario, llame al teléfono de emergencias (112 / 911)
La secuencia de valoración que propone AHA es de C-A-B.
Secuencia C-A-B de la AHA.
4. Compruebe pulso y respiración.
Como profesional sanitario, busque el pulso sobre la arteria carótida durante 5 a 10 segundos. Recuerda contar esos segundos de forma real, es decir, no contar muy rápido.
Mientras que valora el pulso, mire si el tórax del paciente se eleva de forma correcta. Si el paciente no respira o solo jadea/boquea, no se considera respiración normal y es un signos de paro cardíaco.
5. Realice compresiones torácicas de alta calidad.
Realice una secuencia de 30 compresiones y 2 ventilaciones, independientemente del número de realizadores que se encuentren en la escena, recordéis que estamos con un paciente adulto.
Al administrar las compresiones torácicas, es importante que:
QCPR de Philips
Comprima con una frecuencia de entre 100 a 120 cpm.
Comprima el tórax 5 cm como mínimo.
Permita que el tórax se expanda completamente después de cada compresión.
Interrumpa las compresiones lo mínimo posible.
Si es posible, utilice sistemas de retroalimentación (imágen QCPR Philips).
6. Ventilaciones.
Si dispone de un dispositivo de barrera como una pocket mask, utilícelo para ventilar al paciente, para ello, abra la vía aérea con la maniobra de extensión de la cabeza y elevación del mentón. Si sospecha de lesión medular o la maniobra de extensión de la cabeza y elevación del mentón no es efectiva, utilice la tracción mandibular.
Obstrucción de la vía aérea por la lengua.
Extensión de la cabeza y elevación del mentón.
Tracción mandibular.
Imágenes: Libro del proveedor BLS. AHA 2016.
Cuando administre las ventilaciones en adulto, recuerde:
Administre cada ventilación durante 1 segundo.
Observe que el tórax se eleva con las ventilaciones.
Reanude las compresiones torácicas en menos de 10 segundos.
7. Uso del DEA.
Cuando este disponible el DEA, úselo, independientemente de en el momento que se encuentre de la parada. Los pasos para el manejo del DEA podría variar según el modelo, pero por norma general son:
1º. Abra y/o encienda el DEA.
2º. Pegue los parches del DEA sobre el tórax desnudo del paciente y conecte los cables sobre la luz intermitente. Elija los parches de adulto para pacientes mayores de 8 años y pediátricos para menores. En el caso de no tener parches pediátricos, se utilizarán los de adulto. La posición de los parches será anterolateral (un parche por debajo de la clavícula derecha y el otro parche junto al pezón izquierdo) o anteroposterior (un parche entre el lado izquierdo del esternón y el pezón izquierdo, y el otro parche en el lado izquierdo de la espalda del paciente).
Posición anterolateral
Posición anteroposterior
Imágenes: Libro del proveedor BLS. AHA 2016.
3º. Aléjese del paciente y deje que el DEA analice el ritmo.
4º. Si el DEA aconseja una descarga, mientras se carga el desfibrilador, puede realizar compresiones torácicas al paciente para minimizar las interrupciones.
5º. Realice la descarga al paciente, asegurase que nadie está tocando a la víctima.
6º. Tras la descarga, inicie las compresiones torácicas. Si no es necesario la descarga, reanude la RCP inmediatamente.
7º. Al cabo de los 2 minutos, el DEA le parará para analizar el ritmo del paciente nuevamente.
8. Continue con la RCP hasta la llegada del equipo de parada/SEM o el paciente comience a moverse.
Algoritmo de Paro cardíaco para parofesionales sanitarios de la Asociación Americana del Corazón 2015.
No soy el rey de la escritura, de hecho, se me da bastante mal, así que no esperéis grandes redacciones, pero mi objetivo es que todo el contenido que hay en esta página sea lo más claro posible. Diréis, vaya forma de presentarse, no os quito razón, pero me gusta ser claro y realista. Intentaré trasladar mis explicaciones de los cursos que imparto y mi experiencia profesional al “papel” y aportar mi granito de arena para aumentar los conocimientos de los profesionales sanitarios de forma digital.
El principal objetivo de esta web es generar un punto de difusión y encuentro para profesionales de la salud a través de documentación de interés y de utilidad para todos los usuarios. Esta documentación, la iré ampliando de forma periódica, así como actualizando el blog con información de actualidad e interés para todos. Para ello, utilizaré infografías, videos, videoformación y todos los recursos que estén en mi mano para generar cada post y este sea lo más claro posible, contando con colaboradores invitados en alguna publicación especial.
Espero que el contenido de la página sea de vuestro agrado y os resulte de utilidad en vuestro trabajo diario y así poder ofrecer los mejores cuidados a vuestros pacientes.
Y como dijo Aristóteles: “Somos lo que hacemos cada día. De modo que la excelencia no es un acto, sino un hábito”
Hola compañer@s. En esta nueva entrada quiero hacer un análisis del intervalo QT. Espero que sea lo más claro posible.
Vamos al lío…
¿Qué representa?
El intervalo QT representa la duración de la sístole eléctrica ventricular, es decir, la despolarización o contracción y la repolarización o relajación ventricular.
¿Cuáles son las causas del QT largo?
El alargamiento del intervalo QT puede ser congénito o adquirido:
Congénito:
Síndrome de Romano-Ward.
Síndrome de Jervell, Lang-Nielsen.
Adquirido:
Hipertrofia ventricular izquierda.
Alteraciones electrolíticas como la hipopotasemia, hiponatremia o la hipomagnesemia.
Fármacos como los que se están utilizando para el tratamiento del COVID-19, como el Lopinavir/ritanovir o la Hidroxicloroquina/cloroquina.
¿Cómo medimos el QT?
El QT se compone del QRS, segmento ST y la onda T. Según varios autores, la onda U quedaría excluida de este intervalo. Usaremos la derivación que mejor se vea la onda T, normalmente, las derivaciones de miembros (I, II, III, AVF, AVL y AVR)
Es importante saber que el intervalo QT depende de la Frecuencia cardíaca, para ello, deberemos de determinar si el QT es normal o no en función de la FC, lo que se llama, QT corregido (QTc).
Existen varias fórmulas para determinar el QTc, la más utilizada es la fórmula de Bazett, pero esta fórmula puede no ser exacta en bradicardias o taquicardias. Para taquicardias se usará la fórmula de Federicia o la fórmula de Framingham. Los valores normales del QTc son de 420 mseg. en hombres y 440 mseg. en mujeres (entre 8 y 11 cuadradillos)
Es muy importante controlar el intervalo QT de nuestros pacientes, ya que un intervalo QT largo puede originar arritmias malignas como Torsade de Pointes, Asistolia, Taquicardias ventriculares o Fibrilación ventricular
Vamos a ver un ejemplo práctico del cálculo del Intervalo QT. Espero que os guste.
Bibliografía de consulta:
Villacastín JP. Electrocardiografía para el clínico. Segunda edición. Ed. Permanyer. 2014
Quesada A. Manual de electrocardiografía. Ed. Meda. 2009.